Esta es la historia de una de las
tantas aventuras del joven Gawayne, el sobrino del honorable Rey Arturo, y unos
de los caballeros de la mesa redonda.
Su aventura comienza en una tarde,
cuando los caballeros y El Rey Arturo se disponían a disfrutar un gran
banquete. En ese momento las puertas del gran salón se abre y encapuchado entra
un hombre. El Rey Arturo dirige las palabras al hombre:
-
¿¡Quién
osa entrar en mi morada en el momento del banquete!?- Dijo El Rey
-
Saludos
su señoría, disculpe mi atrevimiento, pero permítame presentarme- Dijo el
hombre- Soy el mensajero del reino de Fénix. Me envía el Lord Blackwood en
busca de usted y sus caballeros.
-
¿Qué
noticias me traes de tu reino, hombre?
-
Necesitamos
su ayuda mi Rey. Un caballero oscuro apodado por el reino “El Mensajero De La
Muerte”. Quien trata de apoderarse de nuestro reino por medio del terror,
montado en su gran y poderoso Dragón Rojo.
-
¿Qué
es lo que desea?
-
Necesito
su ayuda, si pudiera volver acompañado por uno de sus caballeros por lo menos, podría
resolver la situación.
El Caballero Lancelot se ofreció, pero
Arturo eligió a Gawayne porque pensó que tenía las cualidades para enfrentar al
“Mensajero Oscuro”.
A la mañana siguiente Gawayne y el mensajero
partieron hacia el reino. Pasaron por muchos obstáculos y distintos oponentes,
como enfrentarse a bestias que salían de sus cuevas en busca de alimento, bárbaros
sedientos de sangre y hasta bandidos en busca de oro y comida. Estos no
representaron ningún peligro, por lo que resultaron ilesos.
Antes de llegar al reino hicieron una
parada por donde residía Merlín, el gran mago, amigo Gawayne.
Merlín al ver a su amigo, lo abrazo
cordialmente y le dijo:
-
Gawayne,
¿Qué te trae por aquí viejo amigo?
-
He
venido a pedirte ayuda- Respondió el joven caballero- Necesito vencer al
“Mensajero De La Muerte”. Tu gran magia y hechicería es de gran ayuda.
-
Cuenta
conmigo, pero a cambio te pediré quedarme con el corazón del “Gran Dragón”.
Para mi es un ingrediente muy importante para mejorar mis hechizos y conjuros,
a través de pociones.
-
Cuenta
con ello-Respondió Gawayne
Sin más que esperar, Merlín, lanzo uno
de sus mas poderosos conjuros sobre la lanza y armadura de Gawayne. Dándole al
caballero un gran poder de resistencia a todo tipo de ataques y una lanza firme
y afilada de grandes cortes.
Honorablemente Gawayne y su
acompañante dieron gracias al mago por su bondadosa ayuda. Una vez dada la
ayuda de El Mago, el caballero y el mensajero siguieron su camino hacia el
reino de Fénix. Pasando mas obstáculos y sin desafío digno alguno, arribaron a
las tierras del reino.
Dentro del castillo, se encontraba el
Lord Blackwood, preocupado y aterrorizado por lo que les esperaba a su reino en
manos de “El Mensajero De La Muerte”. Al gran salón Gawayne y el hombre
pasaron, saludando a su majestad Gawayne habló:
-
Mi
rey he venido en respuesta de su mensaje-Dijo el joven- Si, os ofreceré mi
ayuda.
-
Serás
agradecido por tu valiente ayuda caballero-Hablo el Lord- Por enfrentarte a tan
terrible hombre. Un puñado de mi ejército real lo ayudaran contra el malvado.
En cualquier momento él se dispondrá a atacar a mi reino.
-
De
acuerdo, juro en honor a mi rey que su cabeza rodará
-
Así
será, joven. ¡Preparaos para la batalla!
Después de tanta espera, el “mensajero”
llegó hasta el reino. El caballero y su ejército estaban preparados para la
justa. El caballero oscuro, montado en su dragón, se alzó ante el reino y empezó
a quemar las casas de los aldeanos, con el fuego de su gran bestia. El ejercito
asustado, pero con valentía se enfrentaba al mensajero oscuro, lanzando lanzas
y flechas al cuerpo de la bestia. El mensajero y su dragón descendieron de los
cielos, y dándole a la bestia alada el placer de devorarse a los soldados.
Gawayne aprovechó la situación y clavó
la lanza en el cuello del animal, y con el poder del hechizo, este se retorció
de dolor moviéndose por todos lados hasta caer al suelo sin vida.
El “Mensajero” quedó rodeado contra
miles de soldados pero los elimina con facilidad.
Gawayne se llenó de valentía y lo
enfrenta dejando su lanza y sacando su espada, luego de unos minutos lo
decapita con un movimiento rápido y sutil, al esquivarse el ataque.
El “Caballero Oscuro” murió y el rey,
agradecido, realiza una cena en honor a su valentía.
Al día siguiente Gawayne regresó a la
casa de Merlín para dejarse el corazón del dragón.
Merlín al ver el corazón, le dijo:
-
Me
asombra como acrecenta tu valentía día a día, eres un gran caballero. Nunca
dudé de tus cualidades.
-
Te
lo agradezco, y gracias por tu ayuda. Ahora volveré y contaré mis hazañas a mi
Rey.
Así Gawayne se despidió de Merlín y
montó en su caballo y regresó a La Corte en Camelot, victorioso por su gran
batalla.
Integrantes: Lucas Pino Najarro